
La novela corta, Un Listillo, nos presenta al típico hijo de puta que cree saber mas que los demás, mas que los demás acerca de casi cualquier cosa, y que poco a poco va tirando por aquí y por allá sin ningún objetivo, dejando pasar oportunidades con orgullo, y que conforme pasa el tiempo se siente cada vez menos satisfecho consigo mismo, cada vez mas necesitado de la aprobación de sus congéneres, descendiendo en una alucinante y lenta espiral de drogas y de mierda... tras superar la breve repugnancia inicial que sin duda inspira el protagonista, las cosas se nivelan, y si bien nunca logra inspirar simpatía, al menos llega a un punto medio en el que dejas de desearle una brutal y cómica muerte.
A vuelo de teclado...
... después de todo el lector siempre puede llegar a pensar: "Yo nunca fui tan hijo de puta", y es algo que tal vez se pueda reprochar al mismo lector; la malsana satisfacción que se obtiene al observar a alguien mas jodido, física y mentalmente y disfrutar de no serlo el mismo... tal vez sea esa malsana satisfacción lo que hace tan divertido leer a Welsh, a pesar de su afán de presentarnos uso continuo de drogas, parafilias, violencia y todo tipo de escenas desmoralizantes, nos sigue atrayendo, y tal vez nos atrae porque no nos jode la mente un poco mas, tras leer a Welsh no te sentirás agotado, te sentirás satisfecho y hasta, tal vez, un poco mas generoso y menos infeliz de lo habitual. Imprescindible.
Comentarios
Publicar un comentario
Los comentarios alimentan este blog, el pobre esta muy flaco, así que si no te apetece ver un famélico blog mas deambulando siniestramente por la web ¡comenta!