Una Cuestión personal, Oe Kenzaburo

Bird es profesor de un instituto pre-universitario, esta casado y a punto de ser padre, pero esta situación solo parece lastrar su verdadero sueño de viajar al África, recorriendo sus caminos que aun le parecen vírgenes. Cuando por fin su hijo nace le diagnostican una hernia cerebral y los médicos esperan que sea mortal, al menos a mediano plazo, pero Bird, horrorizado por la monstruosidad a la que considera su hijo pero sobretodo por la forma en que este trunca sus planes, decide apresurar su muerte de forma pasiva en un principio, y poco a poco de forma mas activa, mientras que el recién nacido se niega obstinadamente a morir...Una historia no convencional, a lo largo de ella conocemos las motivaciones de Bird, su inestabilidad emocional, su anterior vida como pandillero, su innegable cobardia, la forma en que se refugia en otras personas, y de cierto modo deja que ellas decidan el destino de su hijo, su incapacidad para tomar decisiones, o enfrentarse con un bebe enfermo, todo ello dentro de un entorno que a veces parece sacado de un mal sueño, donde las cosas tangibles se desdibujan, y la realidad misma, a veces, se antoja volátil.

A Vuelo de Teclado.

Cuando leí Servidumbre Humana despotrique en contra del autor, ya que en el prologo tenia la inconcebible desvergüenza de revelar el final de la historia. Me sentí ofendido con justa razón, ahora al encontrarme con este libro me encuentro uno de esos prólogos que en determinadas editoriales abundan, escrito con aire académico, de enterado, de yo sé de que va, lo cual no es malo, no me malentienden, a veces hasta conoces una buena cantidad de datos inútiles, pero en este caso, con singular falta de sentido común comienza a desgranar el libro, haciendo uso de citas respetables y otras armas negras (inevitable la referencia) mientras G, indignado ante la estúpida forma de intentar acabar con el interés por un libro, justo en el momento en que este empieza, da vuelta a la hoja, y es por ello que concluyo; no lean el prologo.